La entrevista: Josep Anton Caubet

 El trabajo en red es de una riqueza impresionante.

JOSEP ANTON CAUBET BUSQUET, 59 años.  Nacido en la Vall d’Aran,  aterrizó en el año 1979 en Badalona por diferentes motivos y aquí se quedó.

Su formación:  humanidades, trabajo social y  teología.

“Siempre he estado vinculado al mundo social. Desde entidades privadas,  administración pública,  hasta que me ofrecieron este nuevo reto para formar parte del equipo de la comisión social de la Fundació Llegat Roca i Pi”.

 

Nos gustaría saber quién es Josep Anton Caubet, de dónde viene y cómo ha llegado hasta aquí… ¡en tres palabras!

La vocación de ayudar e implicarme en proyectos sociales hace que esté aquí.

Y ¿quién era Roca i Pi? ¿Cómo se fundó la Fundación Roca i Pi?

Roca i Pi era un prohombre de la ciudad de Badalona, que tuvo negocios diversos. Un hombre con mucho patrimonio y que en aquellos tiempos tuvo la sensatez de ponerlo a disposición de la gente necesitada de Badalona. Él y sus hermanos no tuvieron descendencia y por eso lo decidieron así. Hablamos de hace 130 años, donde antiguamente había una fábrica de ropa litúrgica “Can Gusi”.

La finalidad de la Fundación fue recoger el legado que este buen hombre hizo y darle sentido a su decisión. Significa mucho para personas y entidades.

La Fundación se creó a consecuencia de este legado y con el transcurso del tiempo fue cogiendo forma. Poco a poco la gestión se ha ido consolidando y ahora tiene un Patronato muy diverso, muy plural. Y la idea es que en el futuro tenga una mayor consistencia en lo que al proyecto de acción social se refiere en la ciudad y en todo el Barcelonés Norte.

¿Cuáles son los ámbitos donde interviene la Fundación? ¿Cuál sería su proyecto “estrella”?

Básicamente son la infancia y la juventud en riesgo (salud mental y otras discapacidades) como elementos transversales y, por tanto, quiere decir colaboración directa con otras entidades. La salud mental es un tema preocupante, cada vez más.

Nuestro patrimonio lo ponemos a disposición de otros proyectos. Ya sea a nivel de algún piso, algún local o soportes económicos para ayudar con estrategias a otras entidades del territorio.

La perspectiva central de la institución ha sido siempre la vejez, es decir, personas mayores solas o sin recursos económicos. En concreto, disponemos de 150 plazas y Centro de Día, algunas de ellas son concertadas, otras privadas y también disponemos de algunas benéficas, que quiere decir que la Fundación Roca i Pi  asume el coste.

Tenemos, también, el proyecto “Àngels” de inserción laboral. Y, también, trabajamos con personas sin hogar colaborando con otras entidades como pueden ser Cáritas, Mambré y Servicios Sociales.

Ahora estamos trabajando en dos nuevos proyectos para personas mayores y personas sin hogar, a los cuales estamos dedicando muchos esfuerzos y esperamos que durante el 2017 puedan consolidarse.

Más que proyecto estrella, diría que una de las intuiciones y necesidades de Roca i Pi es que sea una entidad al servicio del resto de entidades de todo el Barcelonés Norte, que desarrollen una acción social con cierta envergadura. Asentar la Fundación Roca i Pi con la política social del territorio, con el acompañamiento del conjunto de entidades y ayudarlas a llevar a cabo una labor más transformadora. ¡Eso sería el proyecto estrella!

¿En vuestros proyectos hacéis servir métodos innovadores o diferentes? ¿Nos podrías explicar alguno?

No, quien debe hacer el trabajo innovador son las entidades con nuestra colaboración. Algunas entidades y escuelas de vez en cuando vienen a hacer actividades a Roca i Pi.

Por ejemplo, los niños de la escuela Mare de Déu de la Salut a veces vienen a hacer unos talleres y actividades, así como los jóvenes de la Rotllana y voluntarios de Amics de la Gent Gran participan dando soporte a personas mayores.

¿Cómo es vuestra relación con la Administración?¿Y con el resto de entidades de Badalona? ¿Hacéis trabajo en red?

Con la Administración hemos tenido relaciones muy diversas, según etapas de la vida. Pero en estos momentos es correcta. Tenemos proyectos en común y sufrimos como podéis sufrir el resto de entidades, pero vamos haciendo.

La Administración es muy perversa, es compradora de servicios. Y eso quiere decir que si compran un servicio lo quieren a medida, con sus condiciones y a su manera de entender un concurso público o un contrato de servicios. Personalmente, creo que ésto debería cambiar, o no llegaremos a ninguna parte. Creo que los que deberían dar el primer paso para cambiar, si quieren que las entidades continúen haciendo el trabajo que hacen, debería ser la propia Administración, cambiando el formato de trabajo con las instituciones. Ahora mismo exigen mucho pero ellos no hacen lo mismo.

En este sentido, nosotros tenemos una labor importante para ayudar a entender estas cosas. Que se impliquen más y que valoren más lo que hacen las entidades de Badalona, que son quienes están dando respuesta a muchas necesidades que hay en la ciudad y algunas de ellas no reciben ningún tipo de subvención por parte del Ayuntamiento.

Las entidades han de estar mejor consideradas por parte de la Administración y recibir más soporte.

Creo que hay un desorden bestial de estrategias por parte de la Administración. Ahora se ha puesto de moda el ahorro energético, cuando hay gente que no tiene ni para comer. El Ayuntamiento paga las facturas de las deudas de suministro y no entra en valoraciones para estudiar el origen del problema. Están muy preocupados con eso, cuando tenemos muchos problemas de absentismo escolar, por ejemplo.

Y con el resto de entidades la relación siempre ha sido buena. Evidentemente todavía podría ser mejor, pero de momento continuamos trabajando para que se consolide entre nosotros y entre el resto de entidades.

Y sí que hacemos trabajo en red, ya que trabajamos conjuntamente con muchas entidades y colaboramos a muchos niveles para conseguir llevar a cabo los proyectos en el territorio.

La Fundación Roca i Pi actualmente finanza parte del Centre Obert de la Fundació Salut Alta. ¿A qué otras entidades finanza y cómo las elige?

Financiamos a unas 25 entidades del territorio. Damos apoyo económico al Banco de los Alimentos o bien damos soporte a entidades diversas, como la vuestra, entre otras. La comisión de acción social eleva al Patronato los proyectos por los que apuestan y es el Patronato el que acaba decidiendo si da soporte o no.

Hay una cierta estabilidad en la relación con las entidades, que va acompañada de una estrategia conjunta. Existe un respeto y una cierta autonomía por parte de las entidades.

Con algunas entidades somos más exigentes y con otras hay más confianza por la labor que desarrollan y por los resultados finales.

Sabemos que hay entidades que están en desacuerdo con Roca i Pi por el simple hecho de no darles soporte. Pero tenemos un Patronato suficientemente fuerte para decidir qué es lo hemos de hacer y a quien hemos de dar dicho soporte.

¿Qué esperáis de las entidades? Y ¿qué les aportáis?

El trabajo en red y los proyectos colaborativos son la base.

Estaría muy bien que vosotros, por ejemplo, trabajarais conjuntamente con alguna otra entidad del mismo territorio y buscar elementos de colaboración conjunta. Y complementaros entre vosotros. Hermanos con entidades como el Ateneu Sant Roc o como la Rotllana.  Ésta es una de las tareas que debe hacer Roca i Pi, sin dar más trabajo a las entidades, pero ayudarlas a entender que ésta es la línea a seguir.

La solidez de las instituciones se consigue con los compañeros de camino que se tienen. Y Roca i Pi puede ayudar a conseguir esta solidez.

¿Contáis con voluntarios en Roca i Pi? ¿Qué motiva a la gente a ser voluntario/a de la Fundación?

Básicamente los voluntarios vienen motivados por alguna entidad o porque les interesa colaborar con nosotros. Jóvenes de algunas escuelas, familiares de residentes de Roca i Pi, Amics de la Gent Gran… El espacio físico de la finca también ayuda a que la gente quiera hacer talleres o actividades.

Algunos vienen porque consideran importante hacer un acompañamiento a personas mayores, ya que muchos no cuentan con un soporte familiar. Otros quieren hacer el voluntariado porque creen que a nivel profesional les puede ayudar, ya es más por interés.

Sabemos que vuestra Fundación tiene el ámbito de actuación en Badalona y no en otras ciudades. ¿Ésto es así?

Estamos presentes en todo el Barcelonés Norte. Y el proyecto Àngels de inserción laboral en temas privados también interviene fuera de aquí.

Y ahora, hablemos de ti. ¿Cual es tu misión dentro de la Fundación Roca i Pi?

Gestionar todos los proyectos relacionados con la acción social y dar razón de éstos al Patronato.

¿Qué te motiva a cada día levantarte y venir a trabajar?

Hombreee, para mi es un trabajo muy enriquecedor y muy dinámico. Aún y así, lo más frustrante es que muchas veces querrías llegar más allá y no se puede llegar por diferentes elementos. Yo, de hecho, agradezco mucho que me hayan dado la posibilidad de poder estar aquí. Y forma parte de  mi manera de entender la vida.

¿Alguna experiencia vital especial?

Cuesta mucho diferenciar cuando te has hecho de una manera en este mundo. Trabajo y formaciones o capacidades, forma parte de un conjunto. A mi no me pesa, forma  parte de mi, la parte personal y profesional.

Pros y contras del trabajo en red.

Los pros son que es de una riqueza impresionante. Y que te genera no ir a la tuya, facilita que puedas ir más allá, sentirte acompañado por otros y sentirte valorado hace que superes tics o defectos propios.

Y los contras, que a veces nuestra propia percepción de aquello nuestro es tan importante que el hecho de ir junto a otros, puede hacer pensar que pierdes identidad; formo parte de una red y ya no soy Roca i Pi. Otro podría ser que el hecho de ir acompañados por otros, a menudo hace cambiar la velocidad y has de equilibrar los ritmos para ir todos a una. Son algunas limitaciones que tiene el trabajo en red.

Dos aspectos importantes en los que debemos poner esfuerzos las entidades que trabajamos con la infancia.

Fundamentalmente el acompañamiento a los menores y a sus familias. Y, después, escuchar mucho a los menores porque son los protagonistas y, si les escuchamos, podremos dar una buena respuesta y ayudarlos a hacer un buen proceso. Además, hemos de ser más exigentes con la labor que realizamos. Creo que el grado de exigencia ha bajado mucho, en general.

Y ahora… ¡un sueño tuyo para la Fundación Roca i Pi. Y uno para Badalona!

Para la Fundación, consolidar la dirección que vamos tomando y el soporte al Patronato, y que nuestra presencia sea suficientemente enriquecedora para que la ciudad esté orgullosa de tener a la Fundación Roca i Pi en Badalona.

Y respecto a la ciudad, creo que necesita recuperar el espíritu de hace 50 años. Pienso que Badalona está muy dividida y no se preocupa por los temas realmente importantes.